
¿Su pareja termina el día con dolor musculoesquelético, ese que se ubica en la parte baja de la espalda? Si la respuesta es afirmativa, las sesiones prácticas pueden ser un buen regalo, pues -tras la primera sesión- la molestia comienza a ceder, mejorando la calidad de vida. Otra opción interesante es regalar un lifting energético o pránico, que devuelve la lozanía, tersura y tonicidad a la piel, mediante el uso de cristales de cuarzo consagrados para lograr los mejores resultados. Así, se eliminan informaciones emocionales negativas en las zonas donde se generan las tensiones faciales que derivan en arrugas o líneas de expresión. Todo en el Instituto Pranavida.
Fuente: La segunda