En Chile, el 80% de los recintos del sistema de salud pública utilizan prácticas de bienestar de la salud para atender patologías y la sanación pránica está dentro de este grupo.

 

Presente desde hace décadas en el mundo, la sanación pránica está siendo practicada como prácticas de bienestar de la salud en el sistema público y privado de salud en Chile.

Esto consiste en que pacientes que sufren diversas enfermedades tanto a nivel psicológico como físico, pueden sumar a sus tratamientos convencionales esta práctica de bienestar de la salud que, mediante la transmisión de energía, ayuda a mejorar pacientes.

“No es magia. Simplemente es poder estimular los procesos naturales de autosanación”, resume el psicólogo y director de Pranavida, Jorge Fuentes, quien tiene más de 15 años de experiencia en este campo.

 

¿Cómo se realiza la sanación pránica?

“Lo que hacemos es eliminar los bloqueos bioenergéticos que se presentan asociados a una enfermedad física. Por ejemplo: si hay una artritis, la inflamación no sólo está a nivel físico, sino que también se manifiesta en los cuerpos energéticos, o chacras, que están asociados a esas zonas del cuerpo”, explica Fuentes.

Los terapeutas que realizan esta práctica utilizan las manos o  un cristal de cuarzo con una incrustación de oro (cristal de cuarzo gold), gracias a la cual van desbloqueando y canalizando energía nueva al paciente.

Esta técnica es recomendada para todo tipo de enfermedades desde el ámbito de la psicología como ansiedad, depresión, miedos hasta complejas patologías físicas.

“Es importante aclarar que en ningún caso la sanación pránica se postula como un reemplazo a la medicina convencional, sino como un complemento que mejora los resultados y con ello, posibilita una mejor calidad de vida para los pacientes”, enfatiza el psicólogo Jorge Fuentes.

 

¿Qué dice la ciencia?

Existen diversos estudios que han establecido la efectividad de esta terapia. Un buen ejemplo es la investigación realizada por The Royal Australian and New Zealand College of Psychiatrists, donde se midió la mejoría en pacientes con depresión, utilizando la Sanación Pránica como prácticas de bienestar de la salud a los fármacos.

El grupo analizado se dividió en dos: uno que recibió sesiones de Sanación Pránica y otro, un placebo. Todos los pacientes creían que además de sus medicamentos estaban recibiendo la terapia. 

Los resultados fueron estadísticamente significativos. “Al agregar la Sanación Pránica al uso de psicofármacos  se obtiene una mejora adicional de 30,8%”, consigna el estudio.

En Chile, prácticas de bienestar de la salud está siendo utilizada en el 80% de los servicios de salud pública, y la sanación pránica es parte de este grupo de terapias.

“Si tratamos de responder la incógnita del éxito de la Sanación Pránica en el mundo y en nuestro país, podríamos decir que se debe básicamente a que es una técnica fácil de aprender, y se obtienen resultados inmediatos.

Desde el curso básico, todos los alumnos observan los efectos de la terapia en ellos mismos y en sus compañeros”, finaliza Fuentes.

 

Artículo Publico en BIUT de La tercera